Este fin de semana estoy por acompañar a la piscina a mis hijas y comienzo mi rutina en embetune de bloqueador solar (No voy a echar cuentos, sé que está mal pero, en el cuerpo no suelo ponerme nada. Sí, sí, a pesar de mi sermón de abuelita de hace un par de entradas pero en la cara ¡no se puede salir sin protector solar!). Me pongo en la cicatriz del cuello una línea gruesa y, la que nunca olvido y sobre la que les insisto, la respectiva de la cara como uno suele hacerlo, del hueso ocular para los cachetes, nariz, etc y por la frente.
¡Taaarán! ¿Dónde no nos ponemos bloqueador? ¡En los párpados! Porque la mayoría escuece y no están hechos para esa zona, es más, directamente dicen que lo mantengas alejado del área de los ojos. Pero los párpados son los que más sufren. No sólo son la piel más delicada de la cara, sino que, además de la que más se arruga, la que más fruncimos y achinamos cuando estamos al sol.
Hace ya un tiempo –justamente a través de otro blog- supe de este bloqueador solar de Clarins especial para la zona de los ojos Sunscreen-Wrinkle Control Eye-High Portection. Yo lo uso generalmente a diario –una minigotita es más que suficiente-(sí, mi rutina de cremas me toma como 20 minutos) y de seguro cuando voy a la playa o la piscina.
Les paso el dato para las que están muy expuestas al sol y les preocupa el asunto de las arruguitas y las manchas –que en los párpados también salen manchas-. Yo, con todos los bloqueadores solares correspondientes, las gafas y el sombrero (vamos, que no llevo la sombrilla de milagro) acompaño más tranquila a mis hijas a la piscina ¡cuanto ellas quieran!
Y todos felices…